Al contrario de lo que uno puede pensar, las Tapadas Limeñas fueron una expresión de libertad femenina.

Durante el Virreinato, una gran parte de las mujeres Limeñas se vestían con saya y manto, dejando descubierto un solo ojo, para mantenerse en el anonimato.

Flora Tristán recuerda esta expresión femenina como “la libertad del manto y saya… (una mujer así vestida) puede salir sola.. no hay otro lugar en la tierra donde las mujeres sean más libres”.